que nos pasa?

Sera la represión? tanto tiempo encerrados en nosotros mismos
o la calor que nos hace estallar como animales fogosos,en plena caceria.
Buscando un poco de intimidad para poder conversar sobre tú hijo esta vez
nos refugiamos en nuestro cuarto, con la excusa de cambiarme de ropa.Dejando al
niño viendo los dibujos del Boing y nuestras frases se van acortando mientras
nuestros labios se acercan humedos como si un iman los hiciera juntarse.
Tumbada en mi cama,mirandote fijamente,rodeandote con mis piernas tu espalda y
con mis brazos atraiendo tus hombros hacía mí.Mientras me dices una y otra vez
que el niño puede venir cuando se siente muy solo.
Mientras te beso apasionadamente,y me acaricias como tu sabes,te desabrocho
el pantalón y te ruego que solo un poco,que acabaremos despues cuando el
duerma.
-Por favor solo dejame sentirla un poco............

Calida,dura,firme pero entrando en mi con toda su fuerza,hacía tanto tiempo
que no me follabas que creí romperme en ese mismo momento.El roce de tu miembro
suavemente entrando con reparo por si te pillaban haciendo algo malo.Yo
desesperada por ser follada a lo bestia,moverme como una puta con prisa por
que se corriera su cliente y tu como si lo supieras,me la quitabas en el momento
más desesperante para volver a darmela después caliente,a tu ritmo,sonriendo
y diciendo aguanta hasta despues.
Al final has tenido que hundir tu cara en mi entrepierna y comer de mí.
No se,si por tú propio placer o por acabar con el mío porque me estaba volviendo
loca con tanto jueguecito.
Como si el niño lo supiera ha golpeado la puerta,papa dejame decirte algo.Te has
has levantado,has hablado con él y te has ido al baño.

He abierto la puerta y ahí estabas enjuagandote la boca,he entrado,cerrando
la puerta tras de mí,mientras me mirabas al mismo tiempo que me decías el niño
volvera y yo te replicaba no tardarás tanto en correrte.

Apoyando mis pechos en el labavo,poniendo el culo en jarra y pidiendote que
te corrieras en mi espalda.Ha bastado unas sacudidas de calentura y humedad
viciosa para sentir mi espalda empapada de tan preciado exito.