Papa,ayer te sentí. Casi puedo asegurar que estuviste con nosotros
en esa playa, viéndonos, aprobando mi decisión, empujándome a
sentirme de esa forma, a mirar los niños como los vi.
Ayer respire oxigeno limpio como hacia tiempo que mis pulmones
no recogían,porque no se atrevían a respirar.
Mi corazón ni siquiera latía con normalidad y mi cuerpo se sentía
fatigado,demasiado inerte para enfrentar nada más-
Ahora me enfrentaría a mil batallas si hace falta,porque se
que me curara las heridas,que me esperara en casa igual que yo
lo haré por él,que no debí de haberme alejado nunca de su lado
porque ayer tenía todo lo que tanto pedía a mi lado.
Solo me faltaba la Judit pero poco a poco ella también pondrá
las cosas en su sitio,cuando deje de escuchar el dolor y empiece a
entender el corazón.
Ayer cuando la gaviota paso a vuelo ras y sencillamente se poso
delante mio,sin más, los niños alucinaban y yo la miraba hasta que
volvió alzar el vuelo para pasar una vez más y posarse después en el mar.
Porque no podías ser tú,porque no podías venir y decirme ahora lo entendiste
ahora no te salgas de nuevo del camino que yo te marque,porque sencillamente
no podías venir a decirme que estas a mi lado como yo te pido velando.
Ayer lo tuve todo......
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